Cuatro intendencias están en la mira de la oposición política al gobierno provincial en las elecciones 2021.
A saber: Potrero de los Funes, Naschel, Unión y Tilisarao.
Son territorios en los que los jefes opositores consideran que están en condiciones reales de ganar o de sostener el poder.
Potrero de los Funes. La decisión del intendente, Daniel Orlando de resignar un nuevo mandato en el ejecutivo municipal -lleva 12 años al frente del Municipio- y en cambio encabezar la lista de concejales convirtió a Potrero de los Funes en la elección más importante por lo que representa esa localidad turísticamente.
Junto a Merlo, es la otra gran referencia turística en Argentina si se piensa en San Luis como destino de vacaciones.
Dos sectores opositores al gobierno provincial se sienten en condiciones de gobernarla desde diciembre de 2021: el propio partido del que forma parte Daniel Orlando, “Todos Unidos” y que postula a Pablo Sosa, y “Unidos por San Luis”, el frente que se referencia en Claudio Poggi y que postula a Ignacio Olagaray -foto de portada de nota.
Naschel. Luego de ocho años de gestión, el intendente Miguel Bértola también va por una banca de concejal y le deja abierto el camino del triunfo a Valeria Kuhn, colaboradora en su gestión. Esa localidad del departamento Chacabuco es el “orgullo” del Movipro, el movimiento vecinalista que en esta elección ha logrado un armado provincial, mucho más allá de los límites departamentales.
Unión. La localidad del departamento Dupuy, en el sur puntano, es un enclave de la oposición al gobierno provincial. Su actual intendente, Marcos Espósito, que llegó al sillón municipal por Avanzar y Cambiemos por San Luis va por la reelección y los dirigentes de su espacio consideran que hay muchas probabilidades de un nuevo triunfo. Su antecesor fue el radical Roberto Primitivo Becerra.
Tilisarao. La tierra del maíz salvaje, en el departamento Chacabuco, está en la mira de los dirigentes de la oposición, que entienden hay una coyuntura favorable.
En ese escenario no se puede dejar de señalar la ausencia del dirigente que aglutinaba a numerosos sectores peronistas. Jorge “Gato” Fernández fue quien siempre logró las adhesiones de “los Peralta”, “los Ochoa”, “los Aimale”, y otros grupos que sellaban el triunfo del peronismo en esa localidad. También es cierto que cuando no fue candidato, su sucesor Hugo “Pepe” Olguín ganó por una diferencia que les hizo contener la respiración hasta que se contó el último voto.
Fernández, último intendente electo en 2019 y que renunció para formar parte del máximo tribunal de justicia provincial, ya no está en el ruedo.
Esta vez, el diputado radical con mandato hasta 2023, Ariel Barroso huele el triunfo, y como cazador político no piensa dejar que se le escape la presa.