Cuánto costó ser quiénes somos

El momento en que Castelli argumenta sobre la soberanía del pueblo. Una de las primeras obras sobre las que se construyó el imaginario de Mayo. Autoría de Juan Manuel Blanes. Museo de Bellas Artes "Juan Manuel Blanes", Uruguay.
23 de mayo de 2025

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En la Muy Noble y Muy Leal Ciudad de la Santísima Trinidad, Puerto de Santa María de Buenos Ayres, 25 de Mayo de 1810.

Con esa frase —encabezado formal y completo con el que se abrían documentos oficiales en la época colonial— comienza el acta de constitución del primer gobierno patrio: aquel cuya conformación aprendimos a repetir de memoria, casi como si habláramos de la formación de un equipo de fútbol: Saavedra, Moreno y Paso.

Saavedra (51), presidente; Moreno (32) y Paso (52), secretarios.
Luego los vocales —acaso sólo recordados por los más memoriosos del aula—: Alberti (47), Azcuénaga (56), Belgrano (40); Castelli (46), Matheu (45), y el más chico de todos, Larrea (31).

Alcanzan sus nombres para proyectar una escenografía que se repitió en láminas y manuales escolares, junto a la caracterización de los infaltables personajes de Mayo y que nos acompañaría durante toda nuestra vida.

La llegada de una fragata a Montevideo con la noticia de la disolución de la Junta de Sevilla —el órgano de gobierno español radicado en esa ciudad, una de las pocas que aún no habían caído en manos de los franceses— fue el acelerador de un proceso revolucionario en la cabeza de los criollos.

Miraban con entusiasmo los antecedentes revolucionarios recientes: Estados Unidos (1776), Francia (1789) y Haití —la primera de América Latina, en 1804.

Precisamente, el virrey Cisneros había sido nombrado por esa Junta sevillana. De manera que, ante la novedad de que ya no había autoridad española vigente sobre el Virreinato, se produce el clic: Si no hay rey y tampoco hay autoridad legítima en España, el poder debe volver al pueblo.

Esto es una revolución.

Vamos entonces a la pregunta que le da título a este artículo: ¿cuánto costó la Revolución de Mayo?.

La respuesta es: 521 pesos. Está en las actas del Cabildo, relata Felipe Pigna que sumó los gastos consignados en esa semana entre idas y vueltas, reuniones, celebraciones y demás.
Eso costó 521 pesos, asegura.

Si es mucho o poco, ya lo veremos.
Por ahora digamos que se pagaron:
● 12 pesos en concepto de fletes de 12 carretillas
● 37 pesos y 6 reales en velas para iluminar el Cabildo
● 21 pesos y 6 reales en chocolate, bizcochos y vino
● se compraron 3 relojes para regalar al Capitán, al Teniente y al Alférez de la Compañía Batallón N°3, que realizó la primera guardia de honor de la Primera Junta. Se pagaron 206 pesos y 3 cuartillos reales en concepto de regalos
● se gratificó a la tropa con 100 pesos
● se le pagaron 75 pesos al fondero que preparó las comidas -Pigna señala a Mesías Ramón, un francés con fonda muy
cerca del Cabildo
● se les pagó 18 pesos a los criados
● y 51 pesos a los 50 hombres que repartieron esquelas y pegaron carteles

Dinero más, dinero menos, 521 pesos.

La cifra por sí sola tal vez no permita dimensionar el gasto. Por eso es interesante compararlo con otros montos de la época.
Por ejemplo, vale decir que lo que se gastó en la semana de Mayo fue menos de lo que cobraba por mes Cornelio Saavedra, que como presidente de la Junta tenía un sueldazo: alrededor de 700 pesos mensuales, lo cual equivalía a unos 8 mil pesos anuales.
Con sus 700 pesos mensuales, Saavedra ganaba en un mes, más que lo que cobraba un capitán del Ejército argentino en todo un año: 600 pesos anuales.
No es casual, entonces, que tantos hombres de armas hayan muerto llenos de gloria… pero en la mayor de las pobrezas.

521 pesos, 215 años atrás. Eso costó la revolución de empezar a ser quienes somos. ¿Qué valor le damos hoy?.

En la Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Juana Koslay, Provincia de San Luis, 25 de Mayo de 2025.

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