El 15 de octubre de 2009, el vicepresidente de los Estados Unidos y Nobel de la Paz, Al Gore disertó en Potrero de los Funes, en el cierre del Seminario Internacional de Cambio Climático.
Tres años antes, Gore había conmovido la conciencia mundial con su película “Una verdad incómoda”, ganado dos premios Oscar alertando sobre los efectos del cambio climático y llamaba a los gobiernos a actuar inmediatamente para detener la catástrofe a escala planetaria.
Ese seminario intentaba posicionar a San Luis como un referente a escala nacional y latinoamericana en el abordaje de este problema y de cara a la realización de una Cumbre sobre Cambio Climático en Copenhague, Dinamarca, a fines de ese año y que con el paso del tiempo fue considerada un fracaso, porque no prosperaron los acuerdos supracionales que se intentaron.
Hace menos de 10 días, Misiones fue noticia porque se convirtió en la primera provincia de América Latina en contar con un ministro de Cambio Climático, toda una novedad en un trámite que fue aprobado por los legisladores de esa provincia.
“Misiones da un servicio ecosistémico al planeta, y es momento de que nos paguen por eso», dijo el flamante ministro de Cambio Climático provincial, Patricio Lombardi.
Las tareas que incluye el nuevo ministerio son el desarrollo de planes estratégicos para mitigar el efecto invernadero, desarrollo de energías renovables, uso de biocombustible, adaptación y resiliencia al cambio climático y otros desafíos encarados por el Estado provincial.
Nada de eso parece ajeno a lo que once años atrás se instaló en la agenda pública en San Luis. Lo tenía claro el propio Gobernador Rodríguez Saá cuando planteaba la necesidad de crear una oficina como San Luis Solidario, en reemplazo de Defensa Civil.
Defensa Civil fue una institución creada para responder a emergencias en la época de la Segunda Guerra Mundial, hoy las catástrofes ya no serán por la caída de bombas, sino que estarán referidas al cambio climático o con un origen antropocéntrico, decía entonces.
Han pasado 11 once años y a decir verdad poco se sabe sobre el resultado de esas políticas.
Cada tanto la palabra “Medio Ambiente” queda bien en alguna noticia para promocionar la plantación de árboles en los caminos de acceso de las distintas localidades provincial, alguna vez se habló del plan de recuperación en torno a la Cuenca del Morro y en cambio sobreabundan más incendios y destrucción del medio ambiente que el que nadie hubiese imaginado.
¿Qué pasó en el camino con la continuidad de esas políticas públicas que parecían iniciarse ante los ojos del propio Al Gore?