En un país en el que sus chicos quedan relegados al puesto 63 en Comprensión lectora -de entre 79 que participaron de las pruebas PISA en 2018-; en el puesto 71 en Matemáticas y en el 65 en Ciencias…
En un país en el que el 41% de sus chicos está por debajo del nivel mínimo promediando las tres disciplinas…
En un país en el que la comprensión lectora de sus chicos, al compararlos con los de los países con mejores resultados se traduce en una diferencia de casi 4 años de formación escolar…. urge hablar sobre educación.
Por eso esta página rescata iniciativa del diputado nacional, Karim Alume que presentó públicamente un proyecto de ley que crea el Programa Federal de Equidad Educativa, con la idea de implementar gradualmente en un plazo máximo de 10 años la jornada escolar completa en aquellos establecimientos educativos de gestión estatal que se encuentren en los sectores más vulnerables de la sociedad.
«Este programa trae consigo una fuerte apuesta a ampliar la infraestructura escolar para poder brindar la jornada escolar completa y también para ampliar los recursos humanos, no sólo en número sino también con la capacitación para poder desarrollar este tipo de escuelas en nuestro país», explicó Alume en un video que acompañó su pedido para hacer pública esta iniciativa y conseguir adhesiones.
«Lo que vimos en este tiempo de pandemia y con relación a la escuela, durante la etapa de aislamiento es que la educación como derecho se asentó en un gran porcentaje en los hogares, y las desigualdades de los hogares impactan en la educacion. La pandemia expuso con mayor claridad esas desigualdades. Si bien la Ley de Educación de 2006 hablaba de las escuelas de jornada completa, su aplicacion ha sido mayor en los sectores privados y en mucho lugares que tienen un mejor pasar económico, cuando en realidad lo que se buscaba era que esas escuelas con metodología de jornada completa se implementaran en las zonas con hogares más humildes», argumenta Alume, convencido de que ese desarrollo igualitario podría asegurarse con la instrumentación de este Programa Federal que él promueve con formato de proyecto de ley.
Habla de lo que los especialistas -parafraseando un pasaje bíblico de San Mateo- describen en educación como «el efecto Mateo», esto es: a quien más tiene, más se le dará; y al que menos tiene más se le quitará; en un claro entendimiento de cómo se tiende a profundizar la brecha entre los chicos y los resultados escolares según las posibilidades o herramientas con que cuenten en sus hogares.
De eso habla por ejemplo Jaim Etcheverry -entrevistado por esta página- en su último libro «La Tragedia Continúa», cuando desnuda la profunda inequidad entre la educación de los chicos según los sectores sociales.
A continuación el proyecto elaborado por el diputado Karim Alume.