La situación epidemiológica de la provincia de San Luis se complica cada día más por la cantidad de contagios, la menor disponibilidad de camas de internación en terapia intensiva, el stress al que está sometido cada hora que pasa el personal del sistema de salud provincial y ahora también por la confirmación de que circula la «variante Reino Unido» que afecta con mayor frecuencia a personas que tienen entre 20 y 59 años cuyos tratamientos requieren también con mayor probabilidad internación hospitalaria.
Esta última información fue confirmada en la tarde del viernes pasado por la jefa del Servicio de Infectología del Hospital San Luis, Cristela Aguilera, en un reporte del Comité de Crisis en el que explicó que se tomó un 10% de muestras al azar de diferentes lugares de la provincia y que de su análisis resultó que «un 46,7% de las muestras fueron tipificadas como la variante Manaos y que un 10% corresponden a la variante del Reino Unido”.
“Si lo sumamos al resto de las muestras que diariamente se reciben tenemos que más de un 50% de las variantes que están circulando corresponden a estas que tienen mayor transmisibilidad, capacidad de contagio, mayor capacidad de reinfección (que es una característica de la cepa Manaos). Y ambas variantes tienen mayor probabilidad de internación, ya sea en sala común como en unidades de cuidados críticos”, dijo Aguilera.
Este análisis es posible porque San Luis participa del proyecto argentino de vigilancia geonómica de Sars-Cov-2.
De acuerdo a la información científica brindada la «variante Reino Unido» afecta al grupo etario que va desde los 20 a los 59 años con mayor frecuencia y a personas que no tienen comorbilidades (trastornos por enfermedades), lo que potencia su peligrosidad.
En ese reporte, la ministra de Salud, Silvia Sosa Araujo aseguró que en el Comité de Crisis aguardan la confirmación oficial de las medidas anunciadas por el presidente Alberto Fernández en relación a la continuidad de las restricciones ya vigentes hasta el 21 de mayo.
Esas medidas en San Luis son:
– Está prohibida la circulación de las personas desde las 20 y hasta las 6 horas; sólo se autoriza el tránsito de personas cuyas tareas son consideradas esenciales.
– A las 19 debe finalizar toda la actividad comercial, gastronómica y de servicio, excepto aquellas definidas como esenciales.
– Todas las actividades comerciales, gastronómicas y de servicios habilitadas deberán respetar una ocupación del 30 % como máximo de su capacidad. De esta medida están exceptuadas las actividades definidas como esenciales.
– Los encuentros esenciales en domicilio particular no pueden exceder un máximo de 10 personas.
– Están suspendidas las actividades recreativas, culturales, religiosas, físicas grupales y deportivas en espacios cerrados, por ejemplo, actividad física desarrollada en gimnasios, salas de cine, casinos, ceremonias religiosas, fiestas infantiles en salones o peloteros. Además, están suspendidos los eventos deportivos provinciales, competitivos o recreativos, federados o no federados.
– Se encuentran cerrados todos los parques provinciales, los espacios públicos deportivos, los museos y casas culturales públicas.
– Están suspendidos los eventos que impliquen concurrencia masiva de personas y fiestas patronales provinciales, incluidos los festejos del Cristo de la Quebrada y Cristo de Renca.
– Los agentes de la administración pública, Plan de Inclusión Social y los becarios 22 AG desarrollan sus actividades de manera remota, excepto los definidos como esenciales.
– La asistencia de los alumnos a clases presenciales es optativa, según consideración de los padres.
En cambio están habilitadas las actividades culturales según protocolo vía streaming o al aire libre; los deportes y actividades físicas grupales al aire libre; y los cultos sólo tienen permitidos la adoración perpetua y la asistencia espiritual individual.
Pese a estas restricciones vigentes y al complicado cuadro epidemiológico que atraviesa San Luis, en todos estos días pudo verse aglomeraciones de gente en las puertas de los bancos, haciendo interminables colas -sin respetar el distanciamiento-, amontonamientos de gente en la zona peatonal y céntrica de San Luis, y también un intenso movimiento comercial sin mayores precauciones en la zona conocida como del Trueque en la ciudad de San Luis, sobre la Avenida Lafinur.
En este último caso y más allá de que posiblemente el comercio de esa zona permita la subsistencia de miles de familias, la falta de acompañamiento para ordenar esa circulación peatonal, hacer respetar el distanciamiento y evitar focos de contagio masivos, pone en peligro a muchos más que a sus actores de cada fin de semana.
Lo explica con una sencillez brillante «Pandemia, Un balance social y político de la crisis del Covid-19» del doctor en ciencias sociales e investigador principal del Conicet, Daniel Feierstein: la demorada llegada del pico de casos erosiona la legitimidad de los anuncios -del Gobierno- en tanto y en cuanto la propagación del virus no constituye un fenómeno natural, sino que se encuentra determinada por los comportamientos sociales.