DePolítica
Escribe Juan José Laborda Ibarra
Ex legislador provincial
Este miércoles 25 de Agosto los puntanos conmemoramos 427 años de la fundación de nuestra ciudad:
Pero no siempre fue así. Hasta mediados del siglo pasado lo que se celebraba ese día –“feriado provincial”-, era la festividad del Santo Patrono “San Luis Rey de Francia”.
Con fecha 29 de Diciembre de 1943, el entonces interventor militar de la denominada “Revolución del 43”, Coronel Horacio Carranza dictó el Decreto Nº107 designando una comisión especial integrada por los historiadores puntanos Nicolás Jofré, Gilberto Sosa Loyola y Juan Carlos Saá, junto al Subsecretario de Gobierno, Guillermo Valerga Araoz.
El motivo no era otro que, si era cierto que el año correcto de la fundación era 1594, como algunos pocos sostenían entonces, había que comenzar inmediatamente los preparativos para conmemorar sus 350 años. Y si había que engalanar la ciudad y “tirarla por la ventana…” –como se hizo en 1994 por los 400 años-, no había que tener dudas sobre la fecha correcta.
Su principal problema era que no existía el Acta de Fundación.
Partiendo de esa “carencia», la comisión trabajo durante 6 meses hasta elevar un Informe que fue ratificado mediante Decreto Nº1950 de fecha 13 de Junio de 1944.
Se consultaron los archivos locales y de otras provincias, como también de España, Chile y Perú.
En las conclusiones finales la comisión expreso: “De nuestro estudio se desprende en forma terminante y sin lugar a dudas: 1º) Que se ha perdido el acta de la fundación de San Luis, ignorándose por consecuencia, el día; 2º) que la fundación de la ciudad de San Luis tuvo lugar en el año 1594 y antes del mes de octubre; 3º) Que es muy probable que la fecha de fundación de la Ciudad de San Luis haya sido el 25 de Agosto, día de su Santo Patrono; y 4º) que el ilustre fundador de la ciudad de San Luis fue el General don Luis Jofre y no don Martin García Oñes de Loyola, como equivocadamente se ha venido repitiendo…”.
De su lectura integral, surgen algunos datos curiosos que creemos deben divulgarse en una fecha como hoy:
1º) ¿San Luis de Loyola, primera o segunda ciudad fundada en estas tierras…?
Cuando Pedro de Valdivia fundo la Ciudad de Santiago de Chile en 1541, su poder para explorar y fundar ciudades incluía tierras de hasta 100 leguas hacia el oriente.
Uno de sus colaboradores, Francisco Villagrán en 1551, con el fin de “realizar un reconocimiento de la región transmontana”, atravesó la cordillera y recorrió las actuales provincias de Tucumán, Catamarca, La Rioja y el norte de San Luis, “deteniéndose en la zona de Conlara con el ánimo de fundar allí una población..” dice Juan W. Gez.
La Comisión de 1944 cita la obra de José Aníbal Verdaguer “Historia Eclesiástica de Cuyo”: “… se había proyectado fundar una ciudad en esta región con el nombre de Benavente, pero no se llevó nunca a cabo con esa denominación…”, y agrega más adelante “…en un documento del año 1579 se dice: “En la Ciudad de Benavente, que con el favor de nuestro Señor se ha de poblar en el Valle de la Vera Cruz, Provincia de Conlara…”.
El informe da su opinión sobre la supuesta fundación de esta primer ciudad, anterior a la de San Luis: “Allá la febriciente imaginería del conquistador o gobernador, (quien) pensó echar los cimientos de una pretendida ciudad de Benavente, que hubiera de servir de capital a las tierras puntanas, pero que no paso de la ensoñación de algún ambicioso…”.-
2º) Acta de fundación: ¿inexistente, perdida, robada o mal buscada?
En el Capítulo Primero del Informe se dice: “constantes han sido los esfuerzos y vanas las esperanzas para dar con el acta de la fundación de la Ciudad de San Luís de Loyola…”, (…),”ya que falta el instrumento escrito que establezca la data del acontecimiento histórico averiguado…”.
En la nota 2) del informe, citando el libro “Los aborígenes del país de cuyo” del Padre Pablo Cabrera, se dice que en un expediente judicial de los Tribunales de Córdoba de la época donde se acompañaban los documentos acerca de la fundación y población de San Luis de Loyola, éstos “habían desaparecido”, preguntando dicho autor ¿qué mano misteriosa los desglosaría… y cuándo? “.-
Y para cerrar la polémica (o para dejarla envuelta en un misterio mayor), Reynaldo Pastor en su libro “San Luis ante la historia” (1938) dice al pie de la pagina 23: “Ya en prensa este libro, he sabido que la Junta de Historia de Cuyo, tiene noticias de que el acta de fundación de San Luis, ha sido encontrada en el Archivo de Simancas…”. (Provincia de Valladolid, España).
Seis años después, en 1944, la comisión diría sobre la esta afirmación de Pastor “desgraciadamente esta noticia no es exacta…”.
¿Se la habrá buscado lo suficiente?.
3º) La fecha de su fundación:
La Comisión llego a reunir 43 citas de autores sobre distintas fechas de nuestra fundación.
Todas van de entre el año 1594 al 1596, incluida dos correspondientes a los años 1545 y 1597.
Era tal la confusión producida por la falta del acta de fundación, que autores reconocidos como Reynaldo Pastor llegaron a afirmar hasta dos fechas distintas en sus trabajos historiográficos: “1596” en Reforma a la Constitución de San Luis; y “1 de Mayo de 1594” en San Luis ante la historia.
La fecha de fundación que fijo la comisión bajo el título “fecha provisional y aceptable…”, siguiendo al sacerdote dominico Fray Reginaldo de la Cruz Saldaña Retamar de 1929, fue que “la fundación de la ciudad de San Luis tuvo lugar en el año 1594 y antes del mes de octubre, siendo muy probable que la fecha de la fundación haya sido el 25 de agosto, día de su Santo Patrono…”.
4º) Una Ciudad, ¿tres lugares?
La comisión afirma que la ciudad desde su fundación ha tenido tres “asentamientos” distintos y sucesivos: el primero de 1594 en el lugar denominado “El Bajo” lindante con el Rio Chorrillo, (hoy calles Riobamba y Avda. José Santos Ortiz); el segundo, en el lugar denominado “El Talar” (hoy Parque Industrial Norte), cuyo traslado se produjo en el año 1643 por orden del General Juan de la Guardia Berberana; y el tercero, el de su actual ubicación, (alrededor de la Plaza Independencia) se produjo en 1691, a instancias del Gobernador General de Chile Tomas Marín de Poveda.
5º) ¿Quien fue su fundador?
La comisión menciona en sus notas aclaratorias 33 autores que discrepan con el nombre del fundador.
Que van desde el General Luis Jofré (firmaba como “Jufré”), pasando por el del Gobernador de Chile don Martin García Oñez de Loyola, hasta autores que afirman que fue “uno de los capitanes del Gobernador de Chile…”; “Martin de Loyola mando una expedición a fundarlo…”, “por un comisionado que destaco García Oñes de Loyola…”.
La tesis sobre Martin de Loyola “fundador” se basaba en la llamada “teoría del mandato”: “No funda el que funda, sino quien manda fundar…..”, lo que equivaldría atribuirles el descubrimiento de América a los Reyes Católicos y no a Cristóbal Colón…
Con todos los antecedentes obrantes a esa fecha la comisión se convenció que el ilustre fundador había sido el General don Luis Jofré.
6º) ¿Cuántos nombres tuvo la Ciudad??
El art. 1º de la Carta Orgánica Municipal de nuestra ciudad (1989) establece: “Denominase la Ciudad “San Luis de Loyola Nueva Medina del Rio Seco”, adoptándose para el uso oficial y corriente el nombre abreviado de “Ciudad de San Luis”.
Así lo explicó en su momento el informe de 1944.
“Llamóse “San Luis” la nueva urbe por la circunstancia de que su fundador traía desde la pila el nombre de hijo de Blanca de Castilla, Rey de Francia; … de “Loyola”, en contemplación del entonces Gobernador y Capitán General de Chile don Martín García Oñez de Loyola; … “Nueva Medina del Rio Seco” porque el pueblo natal de Juan Jofré, padre del Luis de nuestra narración, fue el llamado Medina del Rio Seco, de la Provincia de Valladolid, en la península…”.
La comisión menciona otros nombres usados en distintos textos: “San Luis de la Punta de los Venados”; “San Luis Nueva Palmira del Rio Seco”; “San Luis de Loyola Rio Seco de Medina”; “San Luis de Nueva Medina”, afirmando que en los documentos españoles de la época la abreviación oficial fue “San Luis de Loyola”.
La explicación de la comisión se basó en que “los españoles no bautizaban (…) caprichosamente los pueblos o ciudades que regían en sus territorios por ellos conquistados. Vinculaban su denominación al santo del día, al nombre de algún personaje preclaro, a una efemérides, a un hecho memorable, a alguna singularidad topográfica, etc. “.
A 427 años de aquel hito fundacional, el espíritu tenaz y civilizador de aquellos hombres, enfrentando toda clase de desafíos y superando obstáculos, pudo fructificar después y hacer hoy, de aquella ciudad, nuestra casa.
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