Finalmente, y tal como esta página adelantó, Silvia Sosa Araujo fue elegida presidenta de la Cámara de Diputados de la provincia de San Luis, y dio otro paso en su carrera política.
El hecho de haber encabezado la lista ganadora en Pueyrredón, la consideración que tiene sobre su trabajo el Ejecutivo y su experiencia en la administración pública, inclinaron la balanza de sus pares a su favor.
Deberá ahora ajustar el uso horario de la Cámara de Diputados: el viernes a las 8 de la mañana era la única que estaba en la cochera de la Legislatura esperando que alguien abriera el edificio.
Su designación no causó sorpresa, sí en cambio el nombramiento de Berta Arenas como vicepresidenta primera de la Cámara.
La dirigente de Villa Mercedes ingresó a la Legislatura en 2019 junto a Mario Raúl Merlo -bloque Todos Unidos-, y con el paso del tiempo su rol devino en una suerte de “oposición light” al acompañar al Ejecutivo con su voto en varias oportunidades. Hoy pareciera más cerca del oficialismo.
Distinto es el caso de la diputada de Sanluiseños por el Cambio, Verónica Causi cuyo espacio quedó fuera de toda consideración.
Gastón Hissa, del Frente Unidos por San Luis denunció como un atropello institucional la actitud del oficialismo de quedarse con todos los cargos.
“Nos encontramos con una situación que no viene siendo atípica, sino repetitiva y sostenida en el tiempo, que tiene que ver con esto de no darle el lugar o el respeto que merece la institución, no tanto la oposición, sino la institución”, dijo Hissa.
También el diputado Luis Lucero Guillet hizo su reclamó: “Dicen que se respeta el pensamiento distinto, pero la verdad que, a la hora de concretar estos dichos, nada de esto sucede y vemos una vez más el gesto autoritario de quedarse con todo. Lo mismo sucedió con las comisiones de trabajo, donde el oficialismo se quedó con la presidencia y la vicepresidencia y después las comisiones prácticamente no trabajaron a lo largo del año” según declaraciones que recogió el sitio La Gaceta Digital.