Opina Daniel Pairone.
«El cansancio de un pueblo»
No es una novedad ver a mi gente con angustia ante la política más egoísta y autoritaria que lleva a cabo Alfredo Domínguez, quien tiene el rol de conducir los destinos de Justo Daract.
Por estos días, los daractenses, colmados de no encontrar respuestas de las necesidades ya conocidas dice “Basta” y busca en la esperanza de lograr calmar la desesperación de estas políticas con acciones, llenando sus calles de carteles, manifestaciones para que llegue el reclamo al gobierno de la Provincia de San Luis.
Sin política de fuentes de trabajo, cultural, deportiva, de seguridad vial, de medio ambiente, de recreación y contención de niños, jóvenes y adultos, sin política habitacional (1.000 viviendas), sin política de diálogo con su gente (conflicto Empleados Municipales, Empleados Obras sanitarias), empresas cerealeras, instituciones locales, comerciantes, entre otros hacen que, con el aval de ocho concejales dependientes de este Poder Ejecutivo Municipal, no se encuentre tranquilidad por lo que la gente está atravesando una crisis emocional con la decepción más profunda, que este Intendente provoca.
Ya conocemos que Domínguez nunca termina de entender cómo se debe manejar los destinos de un pueblo, no entiende lo que es tener poder… hace años atrás tuvo que interceder el Gobierno de la Provincia en conflictos similares y traer a nuestro pueblo esa tranquilidad deseada.
Nuevamente Justo Daract solicita la intervención del Gobierno de la Provincia de San Luis, para lograr las respuestas que el Intendente Domínguez no puede dar, recordando que cuando el Gobierno pide su aval de confianza cada vez que nos encontramos en elecciones Justo Daract le dice “Sí Gobernador, Justo Daract está presente”.
