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El gobernador Claudio Poggi visitó este lunes la planta de la empresa Dos Anclas en Salinas del Bebedero, donde se lleva adelante la reconstrucción de la nave de purificación, lavado y envasado de sal de mesa, destruida por un incendio en agosto de 2023. La firma invertirá 25 millones de dólares para reactivar la producción local y generará 75 puestos de trabajo.
“Cuenten con el Estado y el Gobierno de la provincia para acompañar la inversión privada”, afirmó el mandatario provincial, ratificando una de las líneas centrales de su gestión: el respaldo al sector productivo para generar empleo genuino y desarrollo territorial.
La recorrida incluyó al presidente de Dos Anclas, Miguel Viegener; al gerente general, Juan Pablo Pasini; y al gerente de planta, Gabriel Craizar, junto a los ministros Federico Trombotto (Desarrollo Productivo y Turismo), Juan Álvarez Pinto (Turismo) y el secretario de Ambiente, Federico Cacace.
Durante el encuentro, los directivos destacaron que la nueva planta contará con tecnología de última generación, lo que permitirá duplicar la capacidad de producción y mejorar la distribución nacional de productos fabricados en San Luis. La obra estaría terminada antes de fin de año y marcará el regreso de la producción de sal de mesa desde La Pampa, donde había sido trasladada tras el incendio.
Pasini subrayó que el proyecto representa “un momento de alegría y esperanza”, y agradeció el acompañamiento estatal en aspectos clave como vialidad, energía, seguridad y educación. “Esta será una fábrica modelo para la industria minera”, aseguró.
Poggi, por su parte, remarcó que “ver resurgir una planta desde sus cimientos, modernizada, con más empleo y mayor distribución, es el San Luis industrial que queremos”. Además, anticipó que volverá para la cosecha de sal y la inauguración de la planta en funcionamiento.
Un contexto de confianza renovada
El anuncio se da en un contexto de creciente confianza empresarial en la provincia. El domingo, la empresa Kimberly-Clark comunicó una inversión de 15 millones de dólares en su planta local para incorporar tecnología y aumentar su producción de pañales, con destino tanto al mercado nacional como a la exportación.
Ambos casos reflejan el nuevo clima de articulación público-privada que impulsa el Gobierno provincial. “Este tipo de inversiones nos entusiasma y motiva, sobre todo en un contexto económico complejo”, concluyó Poggi.
