Daniel Poder
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Todo depende de cuál sea el punto de partida.
Si el traspaso de mando de un gobernante a otro se hace con las cuentas en orden, el Estado funcionando y marchando a la par de una sociedad con sus necesidades básicas satisfechas, cinco meses es un plazo suficiente.
Pero si no hay transición y,
- se usan los últimos seis meses del gobierno que se va para vaciar a los manotazos las arcas provinciales incluidas las reservas de años,
- se diseña un plan político e institucional para imposibilitar la marcha del nuevo gobierno -ni siquiera le autorizaron tomar un anticipo para poder pagar los sueldos de los trabajadores en un solo pago-,
- y todo a la par de un tejido social destrozado por la falta de políticas que el Estado debió haber instrumentado –muchos chicos se duermen en la escuela porque la noche anterior no cenaron mientras en los despachos del hijo «lonko» del ex Gobernador, del ex secretario general Miguel Berardo, y del ex ministro de Gobierno, Fabián Filomena contrataban el pack porno de DirecTV para ver en sus oficinas y las facturas llegaban a nombre del Estado puntano,
entonces, si ese es el punto de partida, con ese nivel de descalabro, cinco meses es un pestañeo.
Y ese es el tiempo que recién lleva Claudio Poggi en el gobierno provincial.
Hay en este tiempo, marcado por una grave crisis económica nacional a la que San Luis podría haber respondido de otra manera si el irresponsable de Rodríguez Saá no hubiese vaciado el fondo anticrisis antes de irse, señales de que el Gobierno logra romper las ataduras con las que intentaron inmovilizarlo.
Algunas de esas acciones están en línea con la construcción política que lleva a la práctica y otras que apuntan a responder a las grandes demandas de la sociedad lo cual también redunda en su consolidación política.
El inicio este lunes de una gira provincial que durará un mes tendrá un enorme valor porque hay que remontarse a muchos años atrás, a la primera gestión de gobierno de Poggi para volver a ver a un gobernador cara a cara con los vecinos.
Más, sólo en la primera semana esa gira enfrentará a los funcionarios con la realidad de quince pueblos de los departamentos Pueyrredón, Pedernera, Belgrano, Ayacucho y San Martín y eso tendrá un fuerte impacto en las definiciones del gobierno. Marcará urgencias y prioridades. Sacudirá al Gabinete.
Precisamente con los intendentes, Poggi lanzó este sábado un plan de obras públicas llamado «Construyendo por tu pueblo» que motorizará el trabajo y el circulo virtuoso del crecimiento en cada localidad. Obras públicas, trabajo, seguridad y desarrollo.
Se notó en el rostro del vicegobernador, Ricardo Endeiza la satisfacción por la masiva concurrencia de intendentes que, sin importar sus pertenencias políticas, firmaron este acuerdo voluntario que es toda una señal de estos tiempos.
Es que son modales que sorprenden a muchos que durante años estuvieron acostumbrados al látigo. A la discrecionalidad, a la imposición, a la falta de diálogo, a recibir órdenes. Esto es parte del cambio cultural y del fortalecimiento institucional.
Hay que recordar que días antes de dejar el Gobierno, Rodríguez Saá instruyó a sus legisladores para que destruyeran todo, se opusieran a todo, como una manera de volver pronto al gobierno. Esa idea que se asemeja a la imagen de Nerón ordenando incendiar Roma fue sofocada porque primó la racionalidad en algunos de esos legisladores que decidieron no acompañarlo en esa locura. Así aparecen nuevas señales de un nuevo tiempo.
Estuvieron en Casa de Gobierno 58 intendentes. Sólo faltaron 8. No fueron Mateo Vilchez, de Villa Larca; Juan Manuel Olguín, de Tilisarao; Romina Peralta, de Renca, Silvia de la Serna, de San Pablo; Diego Gatica, de Fortín El Patria, Sofía Larroude, de Buena Esperanza; Diego Zeballos, de Estancia Grande y Gastón Herrera, de Carpintería.
¿En qué consiste el plan?. Es un plan que permite la financiación de obras en cada localidad por ejecución municipal. Se hace con fondos de la Coparticipación.
Se trata de convenios unilaterales, voluntarios, en los que se establece en base al promedio de coparticipación que va de enero a abril, que el municipio se compromete a aportar un 10% de lo que le va a estar llegando a futuro, mientras por otro lado la Provincia aporta otro 10%, con lo cual se genera un fondo de financiamiento.
Es un fondo extra, voluntario, en el que la Provincia hace un aporte equivalente al que hacen los municipios y está direccionado a obras por ejecución municipal y que tengan que ver con cuestiones de índole municipal.
Lo único que la Provincia exige es que, en base al eje de gobierno relativo a la seguridad, el 30% de esos fondos sean destinados a iluminación LED porque se ha determinado que en muchos pueblos una mejor iluminación ayudará a combatir la inseguridad.
Si bien las obras serán aprobadas por el Ejecutivo provincial lo más importante es que serán decididas por los propios intendentes priorizando las necesidades de los vecinos. Nunca más un parque acuático en una localidad en la que falta agua potable.
Por otra parte, el inicio de la construcción de las viviendas de aquellos adjudicatarios que quedaron colgados a partir de 2016 cuando Rodríguez Saá discontinuó los planes habitacionales asoma en el horizonte próximo. Será ese también un fuerte incentivo a la generación de puestos de trabajo y a la economía local. Medidas que apuntan a la reconstrucción del tejido social y al fortalecimiento del sector privado.
La llegada de Gendarmería a San Luis, luego de 23 años de haber sido expulsada por el entonces jefe de Gabinete, Alberto Rodríguez Saá, -en todo este tiempo fue en la única provincia en la que la fuerza federal no actuó- ha sido por mucho la noticia más celebrada en las redes sociales.
La inseguridad, dijo Poggi hace días en una entrevista televisiva, está junto al trabajo, la vivienda y la salud entre las mayores preocupaciones que los ciudadanos le expresan.
Esta semana salieron a la calle 80 nuevos patrulleros que se repartieron entre Villa Mercedes, Merlo y San Luis. Para dimensionar lo que eso significa hay que decir que la gestión anterior sólo dejó 130 en la calle. El resto casi en situación es desguace. Había sólo 12 móviles para toda la ciudad de San Luis, La Punta y Juana Koslay prestando servicio desde el Comando Radioeléctrico.
En línea con ese eje de gobierno -combatir la inseguridad y la droga- este viernes junto a sus pares de Mendoza, Alfredo Cornejo, y de San Juan, Marcelo Orrego, Poggi firmó un convenio de trabajo sobre diez ejes que apuntan a coordinar el trabajo para prevenir delitos y fortalecer la tarea de las fuerzas policiales.
Hay en la Legislatura un proyecto de ley clave en esta materia: el que propone incorporar en el Código Procesal la figura de la reiterancia, para que el delincuente que está imputado por una causa y vuelve a cometer un delito estando en libertad, espere el juicio por el primer delito en prisión preventiva.
Aportó detalles el jefe de la Policía, Pablo Vieytes: “hay personas que tienen cinco delitos en el transcurso de dos meses y siguen en libertad”. Lo mismo hizo la ministra de Seguridad, Nancy Sosa en declaraciones que reprodujo el medio digital El Chorrillero: desde que asumió Poggi la policía detuvo a 1087 delincuentes en flagrancia, es decir en el momento en el que cometían el delito, y 970 ya están en libertad”.
Cabe preguntarse ¿fue siempre así o se trata de un Poder Judicial que, denunciado por estar colonizado políticamente por Rodríguez Saá, le da rienda suelta a los delincuentes?.
En el camino de estos cinco meses hubo recomposiciones salariales que posiblemente no sean las que los trabajadores estatales desean, son las que se puede en este contexto de tierra arrasada que dejó el anterior gobierno, argumenta Poggi.
Mirarlo a la lupa de la profundidad de la crisis y del poco tiempo que ha pasado es impactante:
Diciembre: fue necesario desdoblar el pago de los salarios estatales porque el dinero no alcanzaba.
Enero: se paga desdoblado aunque se acorta el plazo entre un pago y otro: 31 de enero y 6 de febrero.
Febrero: se normaliza el pago de los salarios. Se anuncia la creación del Programa Alimentario Nutricional Escolar para asegurar el desayuno, la merienda y el almuerzo de los chicos en las escuelas. Se cuadruplica el monto de pago de la asignación escolar y se mantienen los subsidios a los colegios privados.
Marzo: se anticipa el pago del sueldo al día 27, se otorga una cifra mensual no remunerativa de 70 mil pesos. Al personal de salud se lo equipara con el convenio colectivo de ATSA y se empieza a pagar el doble cargo docente. El Estado provincial asume el pago a los maestros del dinero que Nación deja de enviar en concepto de Fondo de Incentivo Docente, lo que equivale al 8% de la masa salarial. También la provincia afronta el subsidio del boleto estudiantil para las ciudades de San Luis, Villa Mercedes y Merlo.
Abril: sigue la recomposición del doble cargo docente, se aumenta un 10% a los directivos de las escuelas, se duplican las asignaciones familiares por hijo y por hijo con discapacidad.
Mayo: se otorga un 15% de aumento para los estatales, se suspende el pago de la cuota mensual por los préstamos otorgados por el Estado. Se anuncia que en junio se completará hasta llegar al 100 por ciento del doble cargo docente.
La actitud del Gobierno por mejorar la situación económica es elocuente. La profundidad de la crisis, descomunal.
Hubo también en estos meses movimientos en el Gabinete. Esas salidas no fueron explicadas, lamentablemente.
Primero se fue Harold Bridger, en su lugar llegó esta semana Walter Vogt, un reconocido empresario de Concarán que tiene el desafío de abrir aduanas, reactivar el Belgrano Cargas y facilitar la producción del sector privado desde la Zona de Actividades Logísticas.
En el acto de su asunción, Poggi anunció que el ex intendente de San Luis, Alfonso Vergés asumirá en los próximos días en el ministerio de Ciencia e Innovación.
Son dirigentes que provienen de Todos Unidos, el espacio que se referencia en Adolfo Rodríguez Saá, que formó parte del armado electoral que condujo Poggi hacia la Gobernación, y que tuvo zamarreos internos como la ruidosa salida de dirigentes como Hugo Murgo.
Todo indica que, a cinco meses de iniciada la gestión, Todos Unidos finalmente completa sus casilleros en el gobierno.
Antes se había ido la ministra de Desarrollo Humano, Mónica Becerra, dirigente de Avanzar.
Este gabinete tendrá entonces en los próximos días una prueba de fuego cuando se vea cara a cara con los vecinos de cada pueblo durante la gira que emprende el Gobernador.
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La provincia de San Luis es el tercer distrito en el que mejor imagen tiene el presidente Javier Milei.
Esa buena consideración de los puntanos para con el líder libertario le traslada a sus dirigentes locales una enorme responsabilidad y expectativa: la conducción de ese espacio y el armado de las futuras listas. Mucho para la escasa química que parece que hay entre ellos.
Algo de eso observaron algunos dirigentes en la visita a San Luis de la vicepresidenta, Victoria Villarruel. Recelo fue la palabra que utilizaron para describir el trato que se dispensan entre sí los libertarios puntanos.
Será interesante ver si logran salir por arriba de esas diferencias que los habitan.
De los tres, la senadora Ivana Arrascaeta, el diputado Carlos D´Alessandro y el senador Bartolomé Abdala, quizá sea este último el más expuesto por su rol como presidente provisional del Senado.
De hecho, esta semana le cayeron fuerte según el diario porteño La Política On Line. El jefe de Gabinete Guillermo Francos empoderó al salteño Juan Carlos Romero, “ante la ineficacia del presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala, y el jefe de la bancada libertaria, Ezequiel Atauche, para conseguir las firmas del dictamen de la ley ómnibus” publicó ese medio a mitad de semana y en plena rosca política por conseguir los votos para el dictamen que habilitaría su tratamiento en sesión.
Estos tres dirigentes tienen una enorme tarea por delante: conducir el espacio y armar las listas para lo que viene.
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A casi un año de que perdiera las elecciones y a cinco meses de una posible reorganización partidaria nacional, hay quienes dicen que el PJ de San Luis es un desorden total, y otros en cambio, dicen que está todo ordenado.
Los que hablan de desorden refieren a falta de conducción, a las críticas que ensayan dirigentes que exigen una renovación total de autoridades, a los pedidos de reflexión sobre la derrota, a la definición de un nuevo horizonte luego de una etapa cumplida después de más de 40 años y a las inoportunas candidaturas que ya lanzan dirigentes como Natalia Zabala Chacur.
Los que dicen que en realidad está todo ordenado expresan tácitamente que este es el plan de Alberto Rodríguez Saá: que nada cambie en el PJ.
Hablan de su idea de sostener el estatus quo partidario. Con los mismos nombres y hasta con la posibilidad de que busquen sus reelecciones los que actualmente cumplen una tarea legislativa.
DePolítica ha dado cuenta oportunamente de las críticas que han expresado dirigentes y espacios aliados como el Movimiento Evita, que reclaman discusión y reorganización. Los dos intendentes de raíz peronista políticamente más fuertes, como Maximiliano Frontera y Toti Videla, también hicieron escuchar sus planteos públicamente.
Sin embargo, nada indica que Rodríguez Saá abra el juego a una interna -ni a padrón abierto ni cerrado-, porque entiende que si lo hace pierde y sale eyectado del sillón de conducción. Por ahora, su sostén son los congresales partidarios que le responden.
Mientras lo que se vio fueron algunas reuniones de muy escasa convocatoria en la vieja sede de calle Bolívar. En la primera de esas jornadas disertó el propio Alberto ante una treintena de personas. Luego fue el turno de la ex senadora nacional y compañera de fórmula de “Gato” Fernández, Eugenia Catalfamo. Menor fue la concurrencia esa vez. El próximo disertante será el ex ministro de Campo y ex candidato a gobernador, Marcelo Amitrano.
En la Legislatura tampoco el ambiente del PJ es bueno. El bloque quedó diezmado y es tentador pensar que los diputados tienen un solo objetivo: buscar su reelección el año que viene.
La radicalidad de sus discursos parece apuntada en ese sentido: mostrarse a los ojos de Rodríguez Saá como los verdaderos intérpretes de su plan de obstaculizar al gobierno.
En esa línea, la reelección de los que ya están, es que la diputada nacional Natalia Zabala Chacur que llegó a su banca luego de la candidatura testimonial y renuncia de María José Zanglá volvió a repetir que quiere ser candidata, y de mínima para renovar su lugar en la Cámara de Diputados de la Nación.
Así sigue el PJ de San Luis a casi un año de su derrota: entre el desorden y el status quo.
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